20060517

Estos últimos días han sido muy prolíficos en cuanto a fotografía se refiere. Les daré una muestra, espero les gusten las imágenes...

Alguna vez una de mis alumnas me preguntó: ¿Cómo le hace para tomar sus fotos?

No lo sé, simplemente las tomo. Respondí. Y lo mismo podría comentarles en este momento.

En ocasiones busco un tema. Uno con el que estuve trabajando mucho, fueron los autos abandonados que abundan en algunas partes de la ciudad. No saben cuántos encontré y en qué condiciomes. La de historias que no habrán sido escritas en su interior o fuera de ellos.

No las quiero averiguar. Deben ser bastante funestas. Una de esas fotografías es al de Mustango. Un auto anaranjado del cual hay una foto al principio de mi blog.

Hace unos días, una amiga de la red me pidió una fotografía mía, más específicamente hablando, me pidió un autorretrato, pues ella me había mandado unos cuantos de ella. No tengo, le respondí, fue entonces que me vi presionado para hacerme unos cuantos. Y ya no ha habido quién me detenga. Ella dice que ha creado un monstruo. Lo mismo dijo mi mamá cuando me recibió en el hospital.

Por el mometno me despido, no se me ocurre nada más para escribir.

20060510

Insomnio

Hace días que no puedo dormir, no como yo quisiera o como a cualquiera le gustaría.

No sé cuál es la causa, sólo sé que es gracioso. Me quedo dormido en el metro, me quedo dormido viendo la televisión, pero una vez llegada la noche, no puedo pegar los párpdos. Bueno, sí puedo, lo que no logro es conciliar el sueño.

Complicado. Bastante. Ahora sé lo que siente el personaje aquel del que alguna vez empecé a escirbir su vida, la misma que se ha apoderado de mí. Insisto, bastante curioso. Muchos escritores dicen que el personaje es el que te lleva a través de la novela, el cuento o lo que sea que estén escribiendo. Nunca lo he creído. Es tu mundo y como tal, tu eres dios, y tu decides el destino de cada uno por gracioso o trágico que éste pueda ser. De lo que nunca había tenido noticia, y no es que me sienta exquisito, es de lo que me pasa actualmente. Soy prisionero de mi personaje. Su vida ha pasado a ser la mía.

Como siempre lo he dicho, de los males el mejor. Así pues, no me resta sino sacar partido de dicha situación, y a trabajar. Es decir, esta experiencia me ayudará a entender más a mi personaje y a profundizar más en su vida; o el en la mía. ¿Será acaso que somos el mismo?

Mientras sean persas o sean manzanas, no es producto del sueño que lo haya puesto así, es una facultad, que para bien o para mal no se pierde, trataré de sacarle el máximo provecho, lo cual será en beneficio del texto mismo.

Tengo sueño, me voy a dormir; si es que puedo.

20060504

Atencazo

Luego del enfrentamiento entre elementos de Seguridad Pública y habitantes de San Salvador Atenco, fuentes policiacas confirmaron que al menos dos personas perdieron la vida. (Notimex)

¿Qué fue lo que llevó a los habitantes de esa región a actuar de dicha manera? ¿Serían provocados o provocadores? No lo sé, y a ciencia cierta quizá nunca se sepa. Ya sabemos que en nuestro país no se necesita quebrantar el orden para ser objeto de agresiones por parte de la policía. No quiero decir con esto que los habitantes de San Salvador Atenco son inocentes, mucho menos puedo decir que sean culpables. Lo que realmente me preocupa es el uso excesivo de la violencia. En otras ocasiones, y dado que las autoridades se han dormido en sus laureles, cuando no están ocupados con sus problemas persoanles, tratando de justificar un reloj carísimo en la muñeca, o intentando dar explicación a la compra de ropa carísima de la primera dama, lo están con los candidatos a la presidencia y cómo lograr apoyarlos con propaganda institucional, basta ver los promocionales de la Presidencia de la República y los del Gobierno del Distrito Federal, y obviamente, intentando que no se note el mensaje entre líneas; pese a todo, la mayoria de la población ya se puede percatar de dicha situación. Y bueno. El chiste es que la seguridad es lo de menos. Pero eso sí, cuando el pueblo, harto de estar en el olvido, se hace justicia por su propia mano, pseudo periodistas, como Ana Winokur, o como quiera que se escriba, critica a los linchadores, preguntándose qué es lo que tendrán en la cabeza dichas personas, dejando de manifiesto que no es lo mismo la justicia para los que pueden pagar por ella, o para los que viven olvidados ya no de la mano de dios, sino de la del gobierno.

Por otra parte, y volviendo a nuestra benemérita y siempre bien ponderada policía, pocos son los que la integran por convicción y no por necesidad, o necedad, sino es que ambas. Entonces, ¿qué se puede esperar de una persona de escaso nivel académico en un puesto en el que se requiere a personal realmente calificado? Por supuesto que nada. No actuan sino como orangutanes. Se saben con el poder por el simple hecho de tenerlo. y claro, como uno no anda con una pistola en la cintura, no hay nada que les impida aventarte, jalonearte o pistearte, con el pretexto de estar cumpliendo con su deber. Lo he visto, lo he leído, lo he escuchado y lo he vivido en carne propia. Es la única manera que tienen de dejar salir todos los problemas mentales y la frustración que llevan dentro.

Así pues, el papel que debieran tener los medios, tampoco es el adecuado. Preferible atacar al pueblo,
cuando lo único que haces es demostrar que el gobierno ha perdido la facultad de serlo. Y claro, cómo han de atreverse a criticar a aquellos que les dan el dinero del pueblo en bandeja de plata (Ley Televisa).

No estoy de acuerdo con la fuerza bruta. Pero ¿qué se puede hacer con una ley que mira para donde hay más billetes? La justicia dejó de llevar los ojos vendados, y la balanza dejó de funcionarle. Ahora sólo se inclina para donde le conviene y mira hacia arriba, olvidándose de los de "abajo". No estoy de acuerdo, pero creo que es justificable. Yo haría lo mismo si la integridad físicade cualquiera de mis familiares estuviera en riesgo, gracias a un individuo que no sabe lo que es trabajar yganarse las cosas honesta y civilizadamente.

Tú, ¿no lo harías de estar en la misma situación?

Literatura a la mexicana

Meses atrás, durante una plática con un profesor de novela que tuvimos, nos hizo una pregunta que nos dejó patinando (por lo menos a mí): ¿Qué futuro pueden esperar ustedes, en caso de publicar, si en México difícilmente se buscan novedades?

Claro que tiene razón. Tiempo atrás compré un libro que me llamó la atención por el título, El molinero Aullador, por la nacionalidad del autor, ya que es difícil obtener noticias de la literatura de por aquellos rumbos del planeta, Arto Paasilina, nacido en Kittila, Finlandia, en 1942; por supuesto también, por ser de Anagrama. Alguien por ahí dice que esa casa editorial es garantía y acertó.

El libro es completamente divertidísimo. Es un crítica a la sociedad, la cual vive temerosa de todo aquel que a sus ojos no es normal, es decir, que es distinto a la media y cómo es que castiga dicho pecado, por lamarle de alguna manera.

Tuve la osadia de invertir en un libro caro, para mi bolsillo lo es, bajo el riesgo de no quedar satisfecho, dejando así en entre dicho la frase de aquel que dijo que Anagrama es garantía.

Ahora bien, si yo, que soy un lector, digamos regular, salvo raras excepciones compro novedades, qué podemos esperar de la media de la población, que a nivel mundial, tiene el más bajo índice de lectura per capita.

Claro que entonces nunca reparé en lo que estaba haciendo, pero cuando nuestro profesor hizo la fatídica pregunta, no pude evitar remitirme al libro de Paasilina. Lo cual me llevó a pensar también que, para que alguien se arriesgue a comprar mi libro, cuando éste se publique, tendría que editarlo una compañía editorial como Anagrama, Tusquets o Alfaguara. Casi cualquier título de esas editoriales son de fiar.

No descarto a las pequeñas casas editoriales, de las cuales he comprado libros, pero por recomendación. Lo cual tendría que suceder también con mi libro, el cual sería más factible de publicarse en un sello pequeño, no por la calidad de mi escrito, sino por la situación que actualmente prevalece en las casas editoriales. Sobre todo las "grandes".

El mentado libro del que les hablo, aún no lo es propiamente dicho. Hacen falta muchos detalles, pero escrito ya está.

Así pues, me despido.

Espero contar con su presencia en mi próximo escrito.